Danzon

Película mexicana de 1991 dirigida por María Novaro y estelarizada por María Rojo y un sinfín de buenos actores

Esta película la vi en su estreno, era yo una chiquilla pero me subyugo la belleza de María Rojo, así como la bella historia que cuenta.

La semana pasada tuve la oportunidad de verla otra vez, y me percate que es una película preciosa que no ha acusado el paso del tiempo.

Les cuento un poco de la historia, Julia es de profesión telefonista, y los fines de semana va a un salón de baile con sus amigas, ahí baila con Carmelo un veracruzano de gran porte, elegante, no es precisamente guapo pero baila danzón como nadie. Cuando Julia baila con él, se siente bella, feliz, libre.

Un día llega al salón, y resulta que Carmelo no aparece, lo extraña y pregunta por él, al no encontrarlo, toma la decisión de tomarse unas vacaciones de su chamba y dejar a su hija que ya es una joven, para ir a Veracruz donde alguien le dice él se marcho.

Julia llega al puerto de Veracruz ahí conoce a una galería de personajes memorables con los que siente una gran empatía, y quienes le ayudan en su búsqueda, sin quererlo también conoce a un hombre mucho más joven que ella, con el que sale y tiene un romance, un día Julia se levanta y se da cuenta que es hora de regresar al D.F. a su vida. Regresa al salón de baile y adivinen, se encuentra a Carmelo como si de solo una pausa se hubiera tratado.

María Rojo encarna perfecto el personaje, vemos a una mujer madura, en la plenitud de su femineidad, se ve primorosa en los bellos pasajes del puerto, una mujer real, pero iluminada en su búsqueda de la felicidad, la música, las lecciones que da de danzón, los lugares que visita, los cambios de vestuario, todo se conjuga para un disfrute inigualable.

Es de esa películas que borran el tiempo, y te muestran la belleza de la felicidad,  desde un helado, un baile, hasta los besos o los abrazos que damos un atardecer en el malecón frente al mar sin pensar en nada más.

Revisando la entrada, veo que use mucho la palabra belleza, pero es inevitable hacer uso de ella, pues encaja perfecto con la sensación que sentimos al verla, así como la estela que deja cuando termina.

Chica ago-go